Un libro completamente único. Aún cuando uno de los descubrimientos claves en la narración podría adivinarse varios capítulos antes de llegar ahí, no deja de ser una historia bellísima contada desde el amor. Además de disfrutar el libro enormemente (aunque quizá tardé unas 50 páginas en quedar atrapada), aprendí sobre mucho sobre Irán y su historia. Me quedo con el concepto de martir, y la forma en que parecer ser parte de la cultura y mente colectiva de este país. Quizá no tan diferente, y quizá muy distinto, del llamado"síndrome de inferioridad" que es parte del colectivo mexicano. El amor queer también añade sabor y belleza a esta historia.
Esta breve novela es el retrato de una mujer que trabajó la mayor parte de su vida en las pistas de caballos -un ambiente donde predomina la masculinidad y los hombres-, y que amó a estos animales desde su infancia. La autora usó entrevistas con esta mujer para crear el libro, el cual está construido a partir de capítulos de una o dos hojas, cada uno conteniendo una anécdota, un sentimiento, o un giro en la vida de Sonia. No sé bien cómo describirlo más que para decir que la experiencia de leerlo es tan única como la vida de quien se retrata en la página. Muy recomendable para cualquiera que ame los caballos, o simplemente quiera adentrarse en este mundo para sentir su crudeza y su esplendor.