Decidí leer este libro por la recomendación de una lectora invitada a un podcast sobre libros. Lo describió como algo totalmente singular, extraño y que la hizo reír a carcajadas. Muy de acuerdo con las primeras dos cosas, es singular y extraño, y habiéndolo leído antes de que (re)empezara el conflicto Israel-Palestina, me dio la oportunidad de aprender sobre la familia de los Netanyahus (uno de sus miembros es el actual primer ministro de Israel), aún si de manera muy adyacente, a través de esta narración que está basada en una historia real. Y bueno, el libro está muy premiado y toda la cosa. Soy capaz de entender por qué. El autor logra crear una viñeta de vida en algo irónico y, al parecer, muy cercano a la cultura del judaísmo. Todo esto para decir que, a pesar del "praise", no fui fan. Fue como leer algo a través de un vidrio opaco. Vi y entendí todo, pero me faltan las referencias para conectar a otro nivel, porque así se queda uno en lo intelectual, sin color y risas.