A dazzling new novel of friendship and redemption in the face of tragedy and loss set in 1980s Chicago and contemporary Paris.

In 1985, Yale Tishman, the development director for an art gallery in Chicago, is about to pull off an amazing coup, bringing in an extraordinary collection of 1920s paintings as a gift to the gallery. Yet as his career begins to flourish, the carnage of the AIDS epidemic grows around him. One by one, his friends are dying and after his friend Nico's funeral, the virus circles closer and closer to Yale himself. Soon the only person he has left is Fiona, Nico's little sister.

Thirty years later, Fiona is in Paris tracking down her estranged daughter who disappeared into a cult. While staying with an old friend, a famous photographer who documented the Chicago crisis, she finds herself finally grappling with the devastating ways AIDS affected her life and her relationship with her daughter. The two intertwining stories take us through the heartbreak of the eighties and the chaos of the modern world, as both Yale and Fiona struggle to find goodness in the midst of disaster.

Casas vacías habla del dolor de las mujeres ante la desaparición de un hijo y de su propia vida. Es una novela que también cuestiona la maternidad y abre la posibilidad de un diálogo sobre cómo se enfrentan las maternidades no solicitadas y que son impuestas socialmente. La maternidad, que casi siempre asociamos con la felicidad, también puede ser una pesadilla: la de una mujer cuyo hijo desaparece en el parque donde estaba jugando, y la de aquella otra mujer que se lo lleva para criarlo como propio

Brenda Navarro ha conseguido un prodigio: caminar siempre, sin caerse nunca, sobre la delgada línea que separa –pero también une– el olvido y la memoria, la esperanza y la depresión, la vida privada y la vida pública, la pérdida y el encuentro, los cuerpos de las mujeres y el acto político. Casas vacías estremece de forma tan devastadora como ilumina: brillante y extrañamente esperanzadora.